domingo, 28 de abril de 2019

MANDALA de PORCELANA FRÍA

Esta es otra forma de realizar MANDALAS, en relieve y muy coloridos. Alegran cualquier ambiente y son ideales para regalar.



Y ésta es la versión envejecida:




MATERIALES:
Masa de porcelana
Pinturas nAcrílicas, öleos, Témperas, Colorantes de Repostería
Bandeja de Plástico, de cartón o madera
Pinceles
Betúm de Judea
Hilo de Nylon
Cortadores de Galletitas


Aquí tengo la masa de porcelana coloreada con pintura acrílica ocre



La estiro primero con la mano y luego con el palote.


La masa debe ser estirada en todos los sentidos para que al contraer lo haga en forma pareja, por eso la voy moviendo.



Si es necesario se puede colocar fécula de maiz para que no se pegue.



comienza a secarse, si han quedado grietas, algunas veces muy poco visibles al hacer algún objeto, al secarse la masa este será el lugar elegido para resquebrajarse.
Si aún esta flexible y nos damos cuenta que comenzó a romperse, en esa zona colocamos cola vinílica y lo aplastamos de nuevo y si la grieta es más grande podemos hacer rollitos con la misma masa y rellenamos con los dedos húmedos.



Como base para el mandala voy a emplear este círculo de bandejita de comida pero puede ser madera o cartón también.



Unto la superficie de la misma con cola vinílica y coloco por encima la masa recién estirada y con el palote presiono en forma pareja para que se estire un poco más y no queden burbujas de aire.





Cuando veo que ya está bien forrada la bandeja, recorto el sobrante, como queda desparejo con el palo de amasar vuelvo a estirar y los bordes con la mano.
Le pego este molde a la masa para darle mayor espesor y rigidez.










Hago un orificio para colgarlo en uno de los extremos.




Recorto un círculo de papel del mismo tamaño y comienzo a doblarlo en mitades para obtener partes iguales y guiarme con los dibujos.





Para hacer el mandala voy a emplear recorte de porcelana de distintos colores. Para ello voy a buscar que forma de cortantes tengo que me puedan servir, yo les doy la idea, ustedes lo harán con lo que dispongan.



Corazones, hojitas, y trato de ubicarlos sobre el papel y los marco con un lápiz, guiándome por las líneas que marqué sobre el papel.





 Hago 4 corazones, entre medio unas hojitas
Y así dibujo el mandala con los cortantes que poseo, insisto, lo que tengan.








Pasamos ahora al teñido de la porcelana. Los pigmentos pueden ser muy variados, en éste caso utilizo  óleos de color verde




Yo probé varios colorantes, les cuento:
Este verde que quedó es más claro, luego probé con pintura acrílica verde para comparar y me pareció que quedó más intenso. También pueden ser témperas, colorantes de repostería, yo diría que tiene mucho que ver el pigmento, la marca que usemos, será necesario probar pero como ven son muchos los colorantes que admite que utilicemos ésta pasta.




No se hagan problema por las manos ya que si se las lavan enseguida no les quedan manchadas.
Al verde que había obtenido con el óleo le voy a colocar pintura acrílica para ver si mejora el color, o sea pueden mezclar distintos colorantes en una misma pieza. Obtengo así otra tonalidad de verde.






Con lila pruebo este colorante de repostería, pero lo que más me ha gustado es la pintura acrílica, como éste anaranjado, quedan colores más fuertes y éste verde claro también es pintura acrílica. Tengan en cuenta algo que es muy importante, ésta masa al secarse intensifica sus colores.







Ahora comienzo a cortar las piezas para fabricar el mandala.
Con el verde claro y un cortador pequeño de flores hago el centro.



Con un trozo más grande de rojo voy a recortar los 4 corazones y así sigo con todas las piezas decidiendo en cada momento que colores irán.




Busco la base, dejo hacia arriba el orificio y coloco por encima el papel con las marcas y con algún punzón marco sobre la porcelana su posición tratando de que el orificio quede sin cubrir.



Luego pego los corazones con cola vinílica, esto se puede hacer ya que las masas están húmedas.




Con el cortador de hojitas hago las piezas en naranja y las pego al lado de los corazones y la flor en el centro.


Con lila flores pequeñas , controlo con el dibujo y recorto con los distintos tonos de verde las hojas y las pego.




A medida que avanzo, lo observo y también voy cambiando de idea en base al espacio que me va quedando, incluso algunas piezas las coloco por encima de otras y modifico la posición en que coloco las flores lilas.









Luego, con la punta de un marcador que tiene forma de flor le hago un borde alrededor aprovechando que la masa está aún blanda, esto me sirve para emparejar el borde y al apretar mejorar la unión con la bandeja.



Hago lo mismo con los pétalos de algunas flores.



Con otro elemento realizo puntos por los bordes de las figuras para adornar más.


Recorto de color naranja unos corazones más pequeños y los pego sobre los rojos más grandes, lo mismo hago con los pétalos del costado


Con un punzón más grande lo paso por el borde para resaltar las figuras del centro.

Estas son solo ideas, se pueden seguir agregando colores y figuras y realizando presiones con distintos elementos hasta que esté a nuestro agrado.


En la porcelana es importante que al hacer las esferas queden grietas ocultas, lo que tenemos que hacer es un amasado previo y luego entre las palmas de la mano, presionando, la forma que tendremos no es esférica pero nos permite eliminar cualquier posible grieta.

La vamos observando, cuando a simple vista está totalmente lisa le comenzamos a dar la forma esférica y luego la dejamos secar moviéndola cada tanto.


Yo realicé unas más pequeñas a las que les voy a hacer un orificio con un palito con punta para usarlas luego.


Aquí está el mandala seco, como les había dicho los colores al secarse se pusieron más fuertes. Están las esferitas secas y realicé este corazón doble imitando a los del centro para colocar debajo.


Una vez bien seco lo barnizo, yo voy a emplear barniz acrílico semimate.


Cuando el barniz está seco armo el mandala, utilizo hilo de nylon que lo paso por el orificio y enhebro las esferas que había hecho de porcelana y coloco el corazón. Hago un nudo con el hilo y pego los sobrantes con cinta de papel.


Para colgarlo, hago previamente un lazo y procedo igual que en el anterior, coloco las cuentas de colores, lo ato y pego los sobrantes.





En éste caso para envejecer éste mandala aplico sobre la pieza barnizada betún de judea con un pincel, lo dejo actuar unos minutos y retiro con un paño de los lugares donde quiero más luminosidad.