En esta cesta tengo una colección de caracoles traídos de playas de diferentes lugares que he visitado.
Por eso cada uno tiene su propia historia y recuerdo asociado.
Y, como siempre me ha gustado experimentar con diferentes materiales, he decidido combinarlos con este posa-torta que tengo en desuso.
También utilizaré este hilo encerado, que es fuerte y resistente a las condiciones climáticas, lo que lo convierte en una excelente opción para cualquier proyecto al exterior.
Por otro lado, tengo algunos collares o pulseras en desuso, así como restos de cuentas de plástico de colores, que reutilizaré para darle un toque más atractivo.
Juntos, estos materiales me permitirán crear un colgante original y lleno de personalidad, perfecto para lucir en cualquier ocasión.
Primero quito el color plateado del pasaporta pintándolo de ambos lados con pintura acrílica negra en aerosol.
Aparte y esto es importante, todos los caracoles que he elegido para este proyecto tienen algún agujero que me permitirá unirlos con el hilo.
Fueron seleccionados cuidadosamente cuándo los recolecté en la playa, pensando en esta idea que hoy les presento.
Para darle un estilo más alegre a mi colgante, decidí pintar los caracoles con pinturas acrílicas de colores.
Antes de hacerlo, me aseguré de lavarlos bien para quitar la sal y la arena.
Podemos pintarlos con pinceles o esponjas, dependiendo con que nos sintamos más cómodos.
Yo elegí varios colores para esta piezas, como el coral, verde manzana, un hermoso turquesa, celeste y blanco. Con estas tonalidades, logré darle un toque especial a mi creación.
"Una vez que he terminado de pintar los caracoles con colores vibrantes, les doy un toque especial agregando colores nacarados que los hagan brillar.
Me aseguré de elegir tonos que complementaran los colores de base de los caracoles, como turquesa, coral, verde, blanco y celeste.
Agregar colores nacarados les da una dimensión adicional y un brillo sutil que hace que los caracoles realmente se destaquen.
Y si no tienes pintura nacarada, también puedes usar esmalte de uñas nacarado en tonos blancos o de colores similares para lograr el mismo efecto".
Les hago un repaso por los caracoles terminados para que puedan observar lo bellos que han quedado.
Ahora que he terminado de pintar los caracoles con colores acrílicos y nacarados puedo apreciar la belleza de cada uno de ellos.
Para comenzar a armar el colgante, corté varios trozos de hilo encerado del largo que quería que tuviera el colgante. Podemos hacer los trozos de igual longitud o diferentes, dependiendo de la estética que se busque.
Luego, usando este hilo encerado, uní los caracoles a lo largo de los trozos de hilo.
Enhebramos las cuentas de plástico, para eso hacemos un nudo en un extremo del hilo para que sostenga la primera pieza, en mi caso esta bolita naranja y luego hago intercambio con piezas de caracoles al tono y otras cuentas de plástico.
Después hago otro nudo para sujetarlas.
Para enhebrar el próximo conjunto realizo otro nudo para sostener , en mi caso deje una distancia entre conjunto de piezas de unos 10 centímetros y vuelvo a combinar diferentes piezas del collar con los caracoles.
A las piezas de color blanco las intercalé con perlas para combinar ambos aspectos nacarados.
Este es un hermoso trabajo para hacerlo con toda la familia, que todos puedan intervenir.
Personalmente, prefiero hacer hileras combinando piezas de un solo color, pero también pueden experimentar con combinaciones de colores. Es importante destacar que, gracias a la aplicación de varias capas de pintura acrílica, los colores quedan muy firmes en los caracoles
Para colgar el porta-caracoles, pensé en varias opciones y finalmente encontré unas cadenas que habían sido utilizadas para sostener macetas, las cuales me parecieron perfectas para este proyecto. Además, la parte de las cadenas que sostenía la maceta formaban un triángulo que aproveché para unir con un alambre finito, dando como resultado un soporte resistente y visualmente agradable.
Colgue este conjunto en mi estudio para sujetarle las tiras de caracoles. En el centro elegí esta cadena a la que le había sujetado en el extremo inferior un caracol mas grande y pesado.
Para atarlo pase el hilo por el porta-macetas y le hice varios nudos para asegurarlo.
A partir de aquí colgue el resto.
Que hay que tener en cuenta?
Recuerden que al enhebrar las cuentas de plástico, pueden jugar con diferentes colores y formas para crear combinaciones únicas y sorprendentes. También es importante tener en cuenta el equilibrio al colgar las tiras de caracoles para evitar que se tuerza.
Si bien el posa-torta tiene un tamaño grande no exageré con el atado de tiras ya que pienso que demasiadas no permiten que estas se luzcan y podemos apreciar cada nudo con su conjunto y ver que todas son diferentes.
Finalmente, imaginen este posa-torta colgando de un hermoso árbol de laurel, iluminando cualquier espacio con sus hermosos colores y su encanto natural.
Para finalizar, puedo decirles que este proyecto de crear un colgante con caracoles y cuentas de plástico es una actividad divertida y creativa que pueden hacer en familia.
Es una forma única de crear una pieza de decoración que no solo es hermosa, sino que también tiene un significado especial al haber sido creada por ustedes mismos.
Espero que les haya inspirado a realizar su propia versión y disfruten de la belleza que pueden crear con elementos simples pero hermosos como los caracoles y las cuentas de plástico.
